Una de las más bellas compensaciones de la vida consiste en que nadie puede tratar sinceramente de ayudar a otro sin que se ayude a sí mismo
Emerson

Ya hemos mencionado, hasta el hartazgo, que el camino # 1 (en orden e importancia) para aprender es rodearse de personas que ya han recorrido el camino que buscamos recorrer. Los minutos con estas personas evitan horas de sudor y lágrimas. Estas lecciones, además, suelen estar "adaptadas" a situaciones cercanas, como tu ciudad, país o industria y, por lo tanto, tienen un valor supremo.

Si todo va bien, para hoy deberías contar ya con un par de conversaciones pactadas para la próxima semana. La idea de esta Guía es darte herramientas concretas para que esas conversaciones se conviertan en relaciones profundas, en las que te conectes con tus mentores, les aportes valor y aproveches su experiencia.

Si aún no lo conseguiste, escríbeme a matias@superhabitos.com y lo trabajamos juntos.

Primero: Reglas para una Buena Relación que deben respetarse. SIEMPRE.

Esto puede parecer obvio para algunos, pero hay un par de principios básicos que tenemos que recordar a la hora de conectar con mentores, para que nuestras relaciones funcionen en el largo plazo:

  1. Siempre se trata de ganar-ganar. Esto es algo que deberíamos tener presente en todas las relaciones: un vínculo entre 2 personas sólo tiene sentido si del mismo ambas salen beneficiadas. Esto es cierto tanto para la relación cliente-vendedor, esposo-esposa y mentor-mentoreado.
  2. Siempre empieza por dar uno. La mayoría de las personas con las que nos relacionamos no tiene por qué confiar en nosotros, regalarnos de su tiempo o siquiera escucharnos. No nos conocen ni deben nada. Si queremos pedir algo, siempre tenemos que ser los primeros en dar y aportar.
  3. Siempre las relaciones son entre personas. El estar trabajando con alguna figura o eminencia puede llevarnos a des-personalizarlo por un segundo, y eso sería un grave error. Todos somos personas (suena obvio, pero no lo es). Eso quiere decir que todos tenemos ciertos problemas y características humanos que se deben recordar y nos importan: hay días en que estamos de buen humor y otros en que no, tenemos familia y una historia personal cercana a nuestro corazón, almorzamos y cenamos, etc. Todos esos puntos necesitan ser recordados para construir relaciones humanas, y también para mostrarle a los demás que nos importan realmente. Dentro de esto es importante saber que los que más nos mueve como personas son los motivos profundos (el "por qué", diría Simon Sinek). Siempre empezá las conversaciones siendo honesto respecto de tus motivos. Otros van a conectarse mucho más con tu historia si comprenden los motivos (problemas económicos, búsqueda de desafíos, inspirar posibilidad), que si simplemente enuncias los aspectos concretos (poner un negocio, aprobar esta materia, vender).
  4. Siempre sé honesto, humilde e íntegro. Más vale perder un posible "contacto" a traicionar tus principios. Mantener la propia integridad en distintos contextos nos vuelve confiables, y serlo es una de las mayores maneras de aportar valor. Cuando hablamos en el punto anterior de los motivos no estamos hablando, por eso, de fingirlos o inventarlos. Buscá en tu interior y encontrá los motivos honestos. Esa honestidad no sólo se transmite en el lenguaje corporal y tono de voz, sino que además te va a llevar a encontrar a las personas adecuadas, que te entienden y comparten tus valores.
  5. Siempre haz trabajo que sea genial, y sé tu mejor versión. Cumple y excede las promesas que hagas. No hay nada que llame la atención, permita aportar valor y te convierta en alguien con quien sea bueno trabajar que resolver problemas, y hacerlo con una sonrisa. No conozco personas positivas, organizadas y aplicadas que queden trabadas en sus vidas. Esto es especialmente importante con mentores, ya que si te dan sus consejos van a valorar ver que los pones en práctica con esmero.
  6. Siempre recuerda que eres único. No importa a quien tengas enfrente, hay algo que vos tienes o sabes que esa persona no. No importa quien sea, desde un multimillonario hasta una modelo top. Si te conocés (con tus fortalezas e historia) y conoces al otro (sus problemas e historia), siempre vas a encontrar algo que aportar. Así sos interesante, y alguien con quien vale la pena pasar el tiempo.
  7. Siempre escucha primero. Es tentador querer hablar, mostrar lo que sabés. Pero lo primero es siempre escuchar. Con los oídos, sí. Pero también con los ojos y con todo tu ser. No es sólo qué te están diciendo, sino también cómo. No hay nada más frustrante para una persona que estar dando un consejo desde una experiencia emocional y que otro no se dé cuenta, o lo tome como una idea más.

Repasar estas reglas e ideas antes de reunirte con un Mentor o de escribir un correo es una de las formas más simples que he encontrado de generar buenos vínculos. Es fácil ir a una conversación muy enfocado en uno mismo, su problema y proyecto, pero si frenamos, respiramos y nos tomamos tiempo para atender, escuchar y preocuparnos activamente por el otro, vamos a construir buenas relaciones y eso es lo que más importa en el largo plazo.

Empezamos hablando de mentores, sí, pero lo importante es empezar a ver amigos 🙂

Segundo: Cómo Aprovechar las Entrevistas

Bueno

Tienes la mentalidad correcta, ya enviaste varios correos y pactaste reuniones o conversaciones.

¿Y ahora?

Debemos repasar algunos consejos para las reuniones, y luego voy a compartir con Ustedes las preguntas más efectivas que he encontrado hasta ahora.

Un Par de Consejos:

  1. Investigar antes. Nunca te reúnas con un mentor sin antes investigar sobre su vida y trayectoria. Tomate tiempo para involucrarte lo más posible en sus problemas, y ve pensando cómo le podés aportar valor. También te permite aprovechar la conversación para completar los aspectos de su historia que tal vez no son públicos, o no surgen en entrevistas normales.
  2. Siempre que puedas, prioriza las reuniones en persona sobre las online. Invitale un café o un almuerzo. Esto puede ser difícil si tu mentor vive en otra ciudad, pero en esos casos intenta priorizar un skype o hangout por sobre simple mail o teléfono. Poder vernos cara a cara cambia mucho el tono de una conversación. Dicho esto, no te apresures para poder conversar "en vivo". Tomate el tiempo necesario para fortalecer la relación.
  3. Siempre empieza por escuchar atentamente, agradecer por su tiempo y explicarle honestamente lo que querés lograr. No tengas miedo de ser claro en tus intenciones, tanto de aportarle valor como de aprender de él.
  4. Toma nota de todo (en serio, todo) lo aprendido. No sobre-estimes tu memoria, ni descartes detalles de lo que te aconsejan porque para vos no sean importantes. Una persona que logró algo que vos todavía no lo está diciendo, así que lo más sabio es anotarlo. Con el permiso de la otra persona también podés grabar la conversación. Evernote te permite hacer las dos cosas en simultaneo, así que puede ser una alternativa.

Las mejores preguntas

Un tema con los Mentores es que son personas que tienen una experiencia enorme pero, en la mayoría de los casos, no se dan cuenta de cuánto vale. Simplemente, para ellos, es "su historia". También puede pasar de que haya ciertos eventos que no se le vengan a la memoria de forma instantánea, porque ya pasaron hace muchos años.

A continuación hay una lista de las mejores preguntas que he descubierto hasta ahora para aprovechar los diálogos con mentores:

  1. ¿Cómo decidiste empezar tu camino a (logro)?
  2. ¿Qué dificultades tuviste para arrancar?
  3. ¿Cómo las superaste?
  4. De todo lo que has visto y leído, ¿qué material te sirvió más?
  5. ¿Qué consejo te hubiera gustado que te den antes de arrancar?
  6. ¿Cómo recordás los primeros tiempos cuando arrancaste? ¿Qué era lo que más te costaba?
  7. ¿Cuál fue el momento en que sentiste que eras bueno? ¿Cómo te diste cuenta?
  8. ¿A qué personas/autores/colegas admirás? ¿Por qué?
  9. ¿Cuál debería ser el primer paso para una persona que quiere (logro)?
  10. ¿Qué cambios impactaron más tu camino hacia (logro)?
  11. Leí en ((libro)) que ((idea o tip)), ¿escuchaste decir eso? ¿qué te parece?

Si su relación se ha fortalecido, también podrías sumar la pregunta clave: Este es mi proyecto/plan, ¿qué te parece? ¿qué le cambiarías?

Esta pregunta es muy importante, pero requiere un nivel de confianza previo. Es importante porque: a) Es un consejo que va a ir dirigido directo a tu situación; b) Es un momento para mostrar tu trabajo previo, y que estás comprometido. Normalmente uno mete la pata con su primer plan, pero si lo hacés con esmero genera empatía; y c) El plan que hiciste funciona como disparador para aspectos concretos que, tal vez, no surgieron en la conversación.

Ahora pasemos a la acción:

Vamos a separa las acciones para la próxima semana en 2 bloques:

Si ya tienes una reunión pactada con un posible mentor +
  1. Arma un plan para la reunión. Elegí una de las 7 Reglas de las Buenas Relaciones para enfocarte y haz la investigación previa. Cuando la termines, elegí 2 o 3 preguntas y prepará un cuaderno/nota de Evernote para la reunión.
Si aún no pactaste una reunión con un posible mentor +
  • Lee atentamente las Reglas para las Buenas Relaciones y trata de descubrir cuál puede ser que no estés aplicando en tus intentos. Escríbeme a matias@superhabitos.com y veamos de pensar alternativas juntos.
  • Con ello, lee nuevamente el texto de la semana 2 y vuelve a intentarlo.
  • Cuando pactes la entrevista, vuelve a este texto y úsalo para preparar todo.