Puede pasar, y es muy probable que pase, que en el actuar del día a día vayamos lentamente desviándonos, perdiendo un poco el rumbo. Puede que a medida que ejecutemos la estrategia, nuestros planes cambien. Que circunstancias o ciertas cosas no den resultados.

Es entonces cuando entra en juego la retroalimentación.

Retroalimentación según la Real Academia Española significa: “Retorno de parte de la salida de un circuito o sistema a su propia entrada”.

Básicamente es mirar para atrás, ajustar y seguir adelante. Es dejar un espacio para poder observar lo que vinimos haciendo y preguntarnos que funcionó y que no, de manera de poder ir avanzando ajustando nuestras acciones de acuerdo a lo más importante.

Para realizar la retroalimentación, nuestra arma principal va a ser un diario.

Los diarios nos permiten mantener un seguimiento fino sobre nuestros día a día. Nos ayudan además a exteriorizar muchas cosas que sentimos y ver cómo se va dando el cambio en nuestras ideas a lo largo del tiempo.

Escribir también nos obliga a mejorar nuestra forma de expresarnos y ser más creativos. Es un lugar donde podemos atrapar nuevas perspectivas que antes no habíamos explorado. Nos deja pisar el freno y revisar que está pasando en nuestro interior.

Con el paso del tiempo, podemos volver sobre lo que escribimos en el pasado. Podemos observar patrones y repeticiones en nuestras conductas. Aprender y enfrentar nuestros desafíos futuros.

La meditación también va a ser muy importante para trabajar la retroalimentación. Cuando meditamos no suprimimos nuestros pensamientos, sino que tomamos distancia de ellos. Esto nos permite observar patrones repetitivos, lo cual se complementa con el diario.

Este Módulo se trata de mantener nuestra mente fresca, saludable y de ser más felices y creativos.

Cómo escribir un diario, paso a paso:

1. Primero que nada, pon en tu día un momento claro en el cual vayas a escribir tu diario.

Házte el hábito de escribirlo siempre en el mismo momento del día. Desde mi experiencia, hay dos momentos que funcionan mejor:

  1. Como parte de tu ritual matutino (tal vez antes de pensar qué hacer hoy, revisar cómo te fue ayer).
  2. Como parte del final del día.

La ventaja de ambos momentos es que están bajo tu control y nadie puede evitar que lo hagas todos los días. Hay personas que prefieren hacerlo por la mañana para hacerlo descansados, pero yo he elegido hacerlo por la noche. De alguna manera creo que escribir el diario permite cerrar el día antes de ir a dormir,  y prefiero dejar libres las mañanas para organizarme o empezar a trabajar en lo importante.

Nada de esto quita que, si estás viviendo una experiencia muy importante y querés escribir sobre ella en ese momento, lo hagas. En la presentación del Módulo hablamos de la importancia del Diario para desacelerar y entender mejor lo que nos pasa. Al escribir cuando algo sucede vas a poder captar las emociones y pensamientos con mayor fuerza y utilizar ese conocimiento para tomar una mejor decisión en el momento, o para luego poder entender qué pasaba por tu cabeza.

2. ¿Sobre qué escribir?

Es tu diario, así que la regla #1 debería ser escribir sobre lo que para ti haya sido importante ese día. Así simplemente empieza con la pregunta: "¿Qué pasó hoy?"

Listo, con eso alcanza.

Cada noche simplemente busca responder a esa pregunta: "¿Qué pasó hoy?".

Recuerda, sin embargo, que es tu diario, y tu creas las reglas. Si esta pregunta no te evoca nada puedes elegir otra pregunta disparadora o tener más de una. En caso de que te sean útiles, te dejo otras posibles opciones a continuación: ¿Qué hiciste? ¿Cómo te sentiste? ¿Con quién hablaste o a quién conociste? ¿Algunas ideas que se te ocurrieron o reflexiones sobre lo que pasó o leíste?

De nuevo, no tienes que cubrir todos estos puntos. Alcanza con escribir lo que se te venga a la mente qué pasó hoy.

Tu diario, tus reglas. Y a tus reglas las define lo que es importante recordar para vos.

3. Ahora te preguntarás ¿Cuánto escribo?

Es importante no proponernos escribir una hoja cada noche, ni hacerlo siguiendo pautas de la literatura Española del Siglo XIV. Esto sólo va a lograr que en el largo plazo terminemos por abandonar el nuevo hábito.

Escribir un diario es más simple de mantener cuando nos acostumbramos a escribirlo de forma sencilla, sintetizando en pequeñas oraciones los puntos remarcables del día. A forma de ejemplo, y aunque es muy personal, les adjunto una entrada de mi diario de hace un par de días. Arriba está la entrada simple y debajo con anotaciones:

Jueves, 29 de Enero de 2014

Mañana enfocado en sacar artículo.

Mediodía cumple Cami. Empanadas. Comedor social.

Tarde De aprender con Rox. Me voló la cabeza y aprendí muchísimo. Tal vez una de las mayores tardes de aprendizaje de mi vida hasta ahora.

Unas Empanadas de cena, y 99 cosas que no hay en España.

La vida es buena.

Ahoy!!

0203


Jueves, 29 de Enero de 2014 ((Siempre empiezo por la fecha))

Mañana enfocado en sacar artículo.

Mediodía cumple Cami. Empanadas. Comedor social. ((Como pueden notar, las oraciones aquí son muy puntuales, y me sirven para recordar aspectos concretos del día, qué festejamos al mediodía, una comida que me gustó y un comentario que me hizo Lu que me pareció divertido. El secreto está en que tu Diario evoque tus recuerdos, no que sirva para el Premio Nobel)).

Tarde De aprender con Rox. Me voló la cabeza y aprendí muchísimo. Tal vez una de las mayores tardes de aprendizaje de mi vida hasta ahora.

Unas Empanadas de cena, y 99 cosas que no hay en España. ((De nuevo, qué hice y temas divertidos que hablamos ahí))

La vida es buena.

Ahoy!! ((Mi frase personal de cierre del diario. Es graciosa, pero no recuerdo por qué la elegí en primer lugar :) ))

0203 ((hora a la que lo escribo, que me sirve luego para ver si me dormí muy tarde esa semana))

Esto no quita que si algún día quieres escribir más, lo hagas. En épocas de decisiones difíciles o en que muchos eventos están sucediendo mi diario puede alargarse bastante. Si sentís que te va a servir, y tienes ganas de hacerlo, entonces adelante. Pero si sientes que hay mucho por escribir y "mejor lo dejo para mañana", entonces escribe, aunque sea una palabra o una oración. Una entrada en mi diario dice: "Es tarde. No tengo ganas de escribir. Ahoy!!" 🙂 Lo importante es incorporar el hábito.

Sobre el disparador: Cuando elijas el momento del día para escribir debes pensar un disparador, como hablamos en este texto sobre formar hábitos. Si es por la mañana puede ser algún elemento que ya tengas en tu rutina para empezar el día (antes de organizarte, después de desayunar, apenas bajas de la cama, etc.). Si es por la noche, puede ser lo último que hagas antes de apagar la PC (si lo tienes en Word), al enchufar el celular para cargarlo durante la noche (este uso yo), o al acostarte (dejando la libreta en la mesa de luz).

¿Y si me olvido un día? Olvidarse un día no es grave, lo importante es retomar apenas nos demos cuenta. Hay noches en que llego cansado y tal vez no enchufo el celular entonces escribir el diario se me pasa de largo. En esos momentos lo mejor es apenas lo pensamos frenar un momento y anotar el diario del día anterior. O, si no, esa noche escribir los 2 días. Lo importante es no atrasarnos más de 2 día seguidos.

4. ¿Y en qué soporte es mejor llevar el diario?

Dado que es un hábito nuevo, queremos que sea fácil de asimilar, y que el costo de hacerlo sea muy bajo. Lo importante del medio que elijas para llevar tu diario es que la plataforma que uses sea portátil, para que no se pierda cuando viajes.  Las 3 opciones principales para mí son:

#1. Papel y lapiz (el viejo y amigable cuaderno):

  • Ventajas: Al ser un objeto físico podemos dejarlo en algún lugar y que actúe, en si mismo, como disparador. Cuando lo usamos no implica distracciones. Es rápido y permite ser un poco más jugueton y desestructurado, porque nos permite dibujar, poner flechas, etc.
  • Desventajas: Si ya tenemos celular o computadora, un cuaderno cada cierto tiempo implica un costo, además de espacio ocupado. Se suma el tiempo para ir a comprarlos. Una vez que completamos un cuaderno tal vez queramos conservarlo, lo cual también ocupa tiempo y espacio.
  • Tip: Si usamos un cuaderno, conseguir uno que sea cómo para llevar con nosotros (por su tamaño) y utilizar algún sistema de etiquetas o símbolos para luego poder repasar rápido su contenido.

#2. El Celular (usando Evernote u otro programa de Notas):

  • Ventajas: En general llevamos el celular con nosotros, y la mayoría de los programas luego se sincroniza con la nube (lo cual crea un respaldo de forma automática, y nos permite acceder incluso desde la PC o Internet). Navegar entre las notas luego es más fácil, usando buscadores. Podemos conservar las notas por el resto de nuestra vida con un costo bajísimo, y sin riesgo de que se arruinen.
  • Desventajas: El celular puede quedarse sin batería. Escribir con el teclado no siempre se siente natural (menos si pasamos más de 5 minutos para escribir el diario). Hay mayor cantidad de distracciones intrínsecas.
  • Tip: Dentro de las notas usa hashtags cada vez que escribas sobre un tema que luego te gustaría ver cómo fue progresando. Por ejemplo, yo usé el #Proyecto28 cada vez que escribía sobre la preparación que hicimos con Lu de nuestro viaje en 2014, y luego pude reconstruir el proceso casi completo.

#3. La Computadora, y algún Procesador de textos

  • Ventajas: es una forma simple de escribir, a la que todos estamos acostumbrados. No ocupa espacio y puede respaldarse y conservarse con facilidad. Podemos buscar dentro de documentos (utilizando el buscador de Word) o entre varios documentos distintos (con el buscador de Windows).
  • Desventajas: En general no se sincroniza ni respalda de forma automática (aunque esto se soluciona con Dropbox). La computadora es la menos transportable de estas 3 opciones, y si está apagada toma bastante tiempo prenderla para escribir y apagarla, aumentando la resistencia y posibilidad de distracciones.
  • Pro-tip: Crea una carpeta sincronizada a Dropbox desde tu PC y lleva el diario allí, creando un Documento por mes. Usa hashtags internos para mantenerlo organizado.

¡Ahora sólo queda escribir el diario!

Esta semana, entonces:

  • Elige un momento para escribir, y fija tu disparador.
  • Elige una plataforma para escribir.
  • Cada día, escribe sobre lo que para ti sea importante, y hazlo de forma sencilla.